Latidos en papel

Siempre volvés, aunque sea por un rato.

Porque lo más lindo de mirar para atrás es ver todo lo caminado, lo mucho que creciste. Caminado porque ya lo sabes bien, sos una eterna acumulación de errores. Fallar de nada sirve si no lo convertís en logro. Errores únicos o situaciones repetidas. Vamos moldeando el camino hacia lo más lindo: nuestra mejor versión. Lo dinámico se vuelve liberador. La libertad se siente en la piel.  Caminar se vuelve despertar. No quiero dejar nunca de andar.

Me desprendo un toque de lo que hace meses no puedo soltar. Guardo silencio mirando por la ventana, con ganas de tocar la arena y de abrazar el mar. Respiro hondo mientras tomo un café, pienso en que podría hacer diferente mañana para que no vuelvas a aparecer. Lo llamo al sentido porque se hace latente. A veces extraño tus besos por la mañana. Por qué será que cuando pienso en vos pienso en el mar. Toda la libertad concentrada en un solo lugar. Porque ahora ya no miro hacia adelante pensando en qué puede pasar. Ahora entiendo que voy a hacer que pase todo eso que me quiero llevar. Queda tanto por bailar. Quedan tangos por vivir.